REINO UNIDO CONDENA LA "VERGONZOSA INCURSIÓN" DE LA GUARDIA CIVIL EN "AGUAS BRITÁNICAS"

Peligra el viaje de la Reina a Londres por la escalada de tensión en Gibraltar

España y Reino Unido vuelven a tropezar en la misma 'Roca'. El histórico contencioso de Gibraltar ha desatado una repentina escalada de la tensión entre ambos países, provocada esta vez por el apresamiento por la Guardia Civil de un pesquero gibraltareño, cuyos ocupantes fueron detenidos y trasladados a Algeciras el pasado fin de semana. El grave incidente amenaza el viaje a Londres de la reina Doña Sofía, que tiene previsto visitar el jueves la capital británica para asistir a la inauguración de los Juegos Olímpicos.

El Gobierno ya obligó a la Reina a suspender un viaje a Londres el pasado mes de mayo, cuando la esposa de Don Juan Carlos debía haber participado en los actos conmemorativos del 60º aniversario de la coronación de Isabel II, a los que sí acudieron representantes de todas las casas reales europeas. El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo, puso en un grave aprieto a la Corona: primero dijo que esa visita era "absolutamente privada", pero más tarde reculó y forzó su suspensión tras conocer que el príncipe Eduardo, hijo menor de Isabel II, visitaría en junio la colonia británica.

Con el telón de fondo del conflicto pesquero no resuelto entre las autoridades del Peñón y la flota de Algeciras y La Línea de la Concepción (Cádiz), el incidente del último fin de semana vuelve a comprometer los planes de la Casa del Rey. El Gobierno británico, por boca de su secretario de Estado para Europa, David Lidington, aseguró ayer estar "conmocionado" por la"vergonzosa" actuación de la Guardia Civil, que calificó de "intolerable". En un comunicado difundido por el Foreign Office, Lidington condena la "incursión en aguas territoriales británicas de Gibraltar".

El Ejecutivo gibraltareño de Fabian Picardo ha alimentado la espiral de tensión, en vísperas del viaje de Doña Sofía, al pedir a la Royal Navy, la Armada británica, que "repela" las "invasiones de nuestro mar territorial", que España se niega a reconocer. "Ha llegado la hora de la acción", sostiene Picardo en un comunicado difundido ayer. Madrid siempre ha defendido que esas aguas son españolas, y que el Tratado de Utrecht de 1713 limita el territorio cedido a Gran Bretaña a la ciudad, el castillo y el puerto de la Roca.

"Ilegalmente detenidos"

Los hechos ocurrieron en la madrugada del viernes al sábado, cuando, según la versión de las autoridades gibraltareñas, agentes de la Guardia Civil "a bordo de la embarcación Río Ceden abordaron y tomaron el control de un barco en aguas territoriales de Gibraltar y, a continuación, trasladaron a sus ocupantes al puerto de Algeciras a gran velocidad y sin luces de navegación". Los dos "ciudadanos británicos" fueron "ilegalmente detenidos", y la Guardia Civil confiscó sus "equipos perfectamente legales", siempre según la misma versión.

El alcalde de Algeciras, el popular José Ignacio Landaluce, aclaró en un comunicado que la embarcación gibraltareña estaba pescando atún rojo, una especie protegida por la Unión Europea, y que a los tripulantes del pesquero, tras ser conducidos a las dependencias de la Guardia Civil en Algeciras para su identificación, se les impuso una sanción administrativa y fueron puestos en libertad.

La Reina tiene previsto viajar el jueves a Londres sin la compañía de Don Juan Carlos. Ese mismo día presidirá, en la embajada española en la capital británica, la recepción al equipo olímpico que defenderá el pabellón de nuestro país en los Juegos Olímpicos. Al día siguiente, por la tarde, Doña Sofía debe acudir al palacio de Buckingham a la recepción oficial que la reina Isabel II ofrecerá a todos los jefes de Estado que asistirán a la inauguración del evento olímpico. Horas más tarde presenciará en el Estadio Olímpico la ceremonia de inauguración de los Juegos.