Malcolm X (1925-1965), también conocido como Asad Mahmood, Detroit Red, El-Hajj Malik El-Shabazz y Omowale, nació con el nombre de Malcolm Little. Fue portavoz norteamericano del grupo conocido como Nación del Islam (NOI) y fundador de la Muslim Mosque, Inc. y de laOrganización de la Unidad Afroamericana (Organization of Afro-American Unity). Murió asesinado a tiros en el salón de baile Audubon de Manhattan al inicio de una conferencia.
En su infancia, el Ku Klux Klan mató a su padre (murió atropellado por un tranvía en dudosas circunstancias) y su madre fue internada después en un centro psiquiátrico. Así pues, tuvo una infancia difícil, mudándose distintas veces, viviendo en distintas casas de acogida... A pesar de ello, fue uno de los mejores estudiantes de su escuela secundaria, pero abandonó después de que un profesor de octavo grado le dijera que sus aspiraciones de ser abogado no eran "ningún objetivo realista para un negro"... Acabó convirtiéndose en un delincuente juvenil... y a ser condenado a prisión unos cuantos años. Pero allí cambió.
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En 1953 (a los 28 años) cambió su nombre de Malcolm Little por Malcolm X. Así explicó el por qué de su nuevo nombre: "Al adoptar la X adquieres un cierto misterio, un cierto poder a los ojos de amigos y enemigos... la X anuncia lo que has sido y serás: ex-fumador, ex-bebedor, ex-cristiano, ex-esclavo.” La X también se corresponde con el apellido desconocido de los esclavos de los cuales era descendiente.
Malcolm X se convirtió en uno de los líderes nacionalistas negros más importantes de los Estados Unidos. Promovió el orgullo negro (apoyando el Black Power y defendiendo la creación de un estado independiente negro), aunque al final llegaría a convertirse en un activista de los derechos humanos de renombre mundial. En Abril de 1965 viajó a Oriente Medio y África y allí compartió sus pensamientos y creencias con personas de distintas culturas. Desde aquel momento, ya no hablaría más para afroamericanos sino a todas las razas.
Para sus admiradores, fue un valiente defensor de los derechos de los afroamericanos, un hombre que acusó a los estadounidenses blancos en las más duras condiciones de sus crímenes contra los estadounidenses negros. En cambio, sus detractores lo acusaron de predicar el racismo y la violencia.
En una conversación de 1965 con Gordon Parks, dos días antes de su asesinato, Malcolm dijo:
“Escuchar a líderes como Nasser, Ben Bella y Nkrumah han hecho darme cuenta de los peligros del racismo. Me he dado cuenta que el racismo no es sólo un problema de blancos y negros. Se dan baños de sangre en todas las naciones de la Tierra en un momento u otro.
Hermano, ¿recuerdas el momento en el que una chica universitaria blanca entró en el restaurante con el propósito de ayudar a reunir a los musulmanes negros y a los blancos, y yo le dije que no había ninguna remota posibilidad y se fue llorando? Bien, he vivido para lamentar aquel incidente. En muchas partes del continente africano vi a estudiantes blancos ayudar a la gente negra. Algo como ésto mata un montón de argumentos. Hice muchas cosas como musulmán negro de las que ahora me lamento. Yo era un zombie por entonces, como todos los musulmanes negros. Estaba hipnotizado. Bueno, supongo que un hombre tiene derecho a hacer el ridículo si está dispuesto a pagar el precio. A mi me costó 12 años.
Esa fue una mala escena, hermano. La enfermedad y la locura de aquellos días... me alegro de estar libre de ellos.”
Algunas otras citas suyas que me llamaron la atención:
"El Dr. King es un ministro cristiano en Atlanta, Georgia, pero se ha hecho más famoso por haber participado en la lucha por los derechos civiles. Hay otro en Nueva York, el reverendo Galamison -no sé si has oído hablar de él aquí- que es un ministro cristiano de Brooklyn, pero que se ha hecho famoso por su lucha contra un sistema escolar que allí favorece la segregación. El Reverendo Clee es un ministro cristiano aquí en Detroit y es el jefe del "Partido de la Libertad ahora." Todos ellos son ministros cristianos. Todos son ministros cristianos, pero no vienen a nosotros como ministros cristianos. Vienen a nosotros como combatientes en algún otro frente, o en todos.
Yo soy un ministro musulmán. De la misma manera que ellos son ministros cristianos, yo soy un ministro musulmán. Y no creo en la lucha hoy en día en cualquier otro frente, sino en todos. De hecho, soy un "Luchador por la Libertad del Nacionalismo Negro” (Black Nationalist Freedom Fighter). El Islam es mi religión, pero creo que mi religión es un asunto personal. Rige mi vida personal, mi moral personal. Y mi filosofía religiosa es personal entre yo y el Dios en quien yo creo, al igual que la filosofía religiosa de ellos se encuentra entre ellos y el Dios en quien creen.
Y es lo mejor. Si tuviéramos que venir aquí a discutir sobre religión, tendríamos demasiadas diferencias y nunca podríamos ir juntos. Si educamos en la religión estaremos en una discusión, y la mejor manera de mantenernos lejos de las discusiones y las diferencias es dejar la religión en casa, en el armario. Mantenla entre ti y tu Dios, porque si no ha hecho nada más para ti de lo que ha hecho ya, tendrás que olvidarla de todos modos."
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"Cuando cambias tu filosofía, cambias tu manera de pensar.
Cuando cambias tu manera de pensar, cambias tu actitud.
Cuando cambias tu actitud, cambias tu comportamiento y entras en acción.
Mientras tengas la filosofía de brazos caídos, también tu manera de pensar lo estará, y mientras pienses de brazos caídos también tu acción será de éste tipo."
Iba en mi coche conduciendo por la autopista, cuando en un semáforo en rojo otro coche se detuvo a mi lado. Una mujer blanca conducía y, en el lado del pasajero, junto a mí, estaba un hombre blanco. "Malcolm X!" -gritó- y cuando le miré, su mano sobresalía del coche hacia mí sonriendo. "¿Le importa darle la mano a un hombre blanco?" Imagína eso! Cuando el semáforo se puso verde, le dije, "No me importa darle la mano a los seres humanos. ¿Es usted uno de ellos?
“Creo en el reconocimiento de todo ser humano como un ser humano: ni blanco, negro, marrón o rojo. Cuando se trata a la humanidad como una familia, no hay cuestiones sobre integración o matrimonios interraciales. Se trata sólo de un ser humano casándose con otro ser humano, o un ser humano viviendo con y junto a otro ser humano.”
“Las cosas nunca mejorarán hasta que ustedes las mejoren.”
"Un hombre que se mantiene sin nada, caerá por cualquier cosa (A man who stands for nothing will fall for anything)."
"Mi alma mater fueron los libros, una buena biblioteca ... me podría pasar el resto de mi vida leyendo, sólo para satisfacer mi curiosidad."
"Tropezar no es caer".
"No hay nada mejor que la adversidad. Cada derrota, cada corazón roto, cada pérdida, contiene su propia semilla, su propia lección sobre cómo mejorar tu rendimiento la próxima vez."
"Creo que si ofreces a la gente un conocimiento profundo de a lo que se enfrenta y las causas básicas que lo producen, crearán su propio programa, y cuando la gente crea un programa, consigues acción."
"Sin educación no vas a ninguna parte en este mundo.”
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