Wikipedia

Resultados de la búsqueda

miércoles, 21 de agosto de 2013

Con permiso de mi gran amigo Manuel J. Marques, asiduo a este humilde blog lo cual le agradezco aquí dejo un excelente art. para que Uds. opinen..

Muchas gracias Manuel.

Un abrazo,

Gema

TITULO: CONSTITUCIONALISMO BURGUÉS. 

 Manuel j.Marques. 1999

El Estado de Derecho excede un simple conjunto de normas constitucionales y legales, pues involucra a todos los ciudadanos, no sólo a diputados que legislan, al orden legal o a políticos que gobiernan, sostenemos en reciente ensayo publicado sobre un análisis crítico del Estado de Derecho burgués. La existencia de un verdadero Estado de Derecho (Rechtsstaat: I. Kant) se mide en el funcionamiento de las instituciones y en la praxis política cotidiana. El Estado de Derecho suministra la libertad para el libre juego de pensamiento y acciones y debe permitir las modificaciones y cambios que el proceso social requiera. El Estado de Derecho excede el campo de lo jurídico para tocar el terreno de la política y la ética, pues existen derechos naturales de las personas, que son inalienables.

Es indiscutible, entonces, la relación entre derecho y política. El derecho debería de emanar de la voluntad de los pueblos no de una élite económica, así el Estado estaría realmente limitado en su acción, por los derechos que esa voluntad encarna. El logro del bien común es el objetivo genérico del derecho. Si bien la democracia es una forma jurídica específica no puede limitarse a garantizar la alternancia en el poder de las diversas expresiones políticas, sino que debe avanzar en la institucionalización de principios y valores de justicia social distributiva. (Gracia, Jordi. 1990).

El derecho, para decirlo claramente, es un fenómeno politizado (es decir, de naturaleza política) pues dependerá del consenso alcanzado de forma democrática, aunque la formalidad de la democracia no proporciona automáticamente, un verdadero Estado de derecho.

En otras palabras los derechos sociales deberían ser incorporados a los fundamentos del orden estatal mismo. Por lo que debemos aspirar a un Estado Social de Derecho y es lo que la radicalización de la democracia en este siglo XXI, debe profundizar, permitiendo que se plasmen en las conductas políticas democráticas de todos los días, la mutabilidad, el conflicto y los desafíos relativos al bien común. Para ello han de crearse canales donde fluyan las voluntades y se encaucen los procesos de desarrollo de las personas que constituyen todo el entramado democrático. Se requiere, pues, de una cultura política de la legalidad vista como la convicción de que no basta la existencia de un Estado de Derecho para que pueda hablarse de una sociedad justa, pues la justicia sólo se alcanza en un Estado Social de Derecho. Al igual que debemos entender que es en la democracia directa, donde se puede proceder a distribuir la riqueza social.

La democracia está hecha de los materiales sociales que componen la sociedad llamada democrática. Las normas jurídicas no son legítimas sólo por su origen, fundamentalmente lo deben ser por sus efectos. El asunto es, pues, el papel del derecho (Rule of law) en la fundación y regulación de la democracia. La Constitución es teóricamente, el consenso sobre una concepción de la vida colectiva, es la norma que rige el contrato social. En nuestra sociedad no existe un compromiso hacia las reglas del juego democrático encarnado en el derecho, porque el pueblo no es el creador de su propio contrato social, que dio lugar a una forma de Estado, ya que este papel fue suplantado de facto por una oligarquía semi-feudal y prosaica, que fundó y ha manipulado al Estado a su antojo y conveniencia, hasta hoy que ha perdido poder de influencia y recurre a la sedición. El Estado Social de Derecho implica principios éticos, jurídicos y políticos que deben tener eco en las decisiones judiciales que fomenten el respeto a las reglas fundamentales de un juego social pactado de manera plural y equitativa, que no es el caso de nuestros países y que comienza aparecer en Europa.
Las crisis sistémicas del capitalismo son violentas y depredadoras; tienden al exterminio de la humanidad cuando se redoblan las contradicciones que producen y reproducen al capitalismo, como la exclusión social, el desempleo, el armamentismo, el narcotráfico, el parasitismo financiero, la corrupción, la prostitución, la degradación ambiental, las nuevas formas de colonización, el genocidio, las guerras químico bacteriológicas, incluida la nuclear, el control mediático, la enajenación y los sórdidos procesos de cosificación humana; pero las crisis y las ofensivas también abren la posibilidad de la revolución anti capitalista, porque la burguesía trasnacional no únicamente ha creado las armas que le darán muerte sino también a los hombres que encabezarán las luchas de liberación. El capitalismo mundial se asemeja hoy al aprendiz de brujo que no es capaz de dominar las potencias infernales que ha desatado con sus conjuros. (El manifiesto comunista: 1848) –Tomado de Valqui y Pastor Bazán: 2009-
Esta crisis del capitalismo mundial, como la que estremece sus cimientos en el Siglo XXI, está a la orden del día, cuestiona y reestructura relaciones; exacerba las violencias inherentes al capital y pone al desnudo su naturaleza antihumana. La crisis también destruye grandes fuerzas productivas, los equilibrios entre los hombres, la naturaleza y sus riquezas ambientales. Marx visionariamente advirtió: “La producción capitalista no desarrolla la técnica y la combinación del proceso social de la producción, sin socavar, al mismo tiempo, los dos manantiales de toda riqueza: La tierra y el trabajo” (Grundrisse. Crítica a la economía política: 1858)

En consecuencia, las relaciones jurídicas en una sociedad de clases como la capitalista, giran principalmente alrededor de las relaciones de producción y de la propiedad privada, de las que no se pueden apartar. Así como el Estado es en esencia la forma bajo la cual la clase dominante ejerce y defiende sus intereses, el Derecho que la legaliza bajo cualquier matiz refinado de los teóricos del Derecho abstracto, es en principio la voluntad de la clase dominante erigida en ley, mas no la voluntad de las comunidades humanas, a quienes les resulta sólo una ilusión. La historia y la vida de los pueblos están plagadas de montañas de injusticias, impunidades y falsedades que el mercantilismo jurídico se encarga de mitificar y validar. Ya en la Grecia esclavista, escribe E. Bodenheimer, en su Teoría del Derecho, que el sofista Trasímaco, enseñaba que las leyes las creaban los hombres que se encontraban en el poder, para su propio beneficio, y que la justicia no era más que lo que conviene el más fuerte en la sociedad. (Valqui y Pastor Bazan. Op. Cit.).
Como se advierte, el orden legal no es creador, sino la creación es el orden económico. Enfoque epistémico y hecho histórico que Marx subraya al destacar: “(…) la ilusión jurídica, no concibe la ley como producto de las relaciones materiales de producción, sino que, a la inversa, ve en las relaciones de producción el fruto de la ley. Linguet arrojó por la borda, con un par de palabras, el quimérico Espíritu de las Leyes de Montesquieu. “L'esprit des lois, c'est la proprieté (El espíritu de las leyes es la propiedad).” (El Capital: 1848)
Con esto, Marx destacaba el papel y carácter de clase del derecho en la sociedad y las relaciones de clase, basadas en la propiedad privada. Esta postura crítica contrasta con el predominio de las ideologías del Derecho puro, formal, ahistórico, libre de “acrecencias meta-jurídicas”, como lo postula Hans Kelsen; es decir, convertido en un “Algebra”, en la cabeza y la acción del hombre de la calle y de los especialistas del Derecho.

7 comentarios:

  1. Marx, al igual que los economistas clásicos se equiocaron en la teoría del valor-trabajo. Lo que le da valor a una mercancía es la subjetividad con la que los humanos juzgan lo valioso que es un producto o servicio. Por ejemplo, ¿por qué los diamantes son más caros que el agua? La respuesta es la escasez relativa de los primeros ante el agua, que ciertamente es más valiosa para la supervivencia del ser humano. El autor debería leer a los autores austriacos que derrumbaron al marxismo. Recomiendo a Menguer, Von Wieser, Jevons, Bhöm Bawerk y Shumpeter. También debería leer a Hayek, Von Miseses y Murray Rothbard para entender el porqué de los ciclos económicos capitalistas, el porqué son los bancos centrales los que provocan las crsisi capitalistas y no el mercado. La verdadera revolución tecnológica han provenido de los países capitalistas, jamás del socialismo real. En el capitalismo la esencia es que el Estado de Derecho respete la propiedad privada. Los píses que la abolieron por la filosofía marxista, sólo lograron tener miseria y pobreza. España ññeg+o a ser un paíse desarrollado gracias al capitalismo. Ahora con la crisis financiera que vive España, algunos españoles, por ignorancia, maldicen al capitalismo. El autor se confunde, las crisis sistémicas del capitalismo provienen del inmenso intervencionismo estatal, el mercado es sólo el instrumento en donde se intercambian bienes y servicios, eliminarlo equivaldría al suicidio de la humanidad. La delincuencia, la corrupción, la prostitución surgen no por el capitalismo, sino por la conducta humana que es imperfecta. Por cierto, en los países avanzados capitalistas, la corrupción y la delincuencia es menor. En los países más atrasado la corrupción es mayor. El socialismo es el sistema económico más deficiente y perverso que ha existido. Sólo hay que ver a las corea capitalista y a la socialista. El progreso en la primera es inmenso, mientras que la miseria, el subdesarrollo y el atraso tecnológico son propios de la corea marxista o socialista o de planificación central, ese que tanto adora el autor de este artículo. Recomiendo el blog www.liberalismo.org

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. godofredo en tus palabras encuentro cosas con sentido pero otras que carecen, quizas el comunismo de north korea no se bien visto por muchos occidentales que se han criado con el capitalismo pero podemos darnos cuenta que las necesidades basicas son suplidas, que quizas north korea no pueda suplirlas completamente exacto no puede esta bloqueado por una politica hostil internacional, hablando con gente que ha ido y venido de north korea confirman esta realidad.

      Eliminar
  2. GRACIAS AMIGO GODOFREDO.

    Ideas rectoras y Dirección Política

    Alcanzar esos niveles de calidad de vida y de valores indispensables como el sentido de la dignidad nacional, la solidaridad, la honradez acrisolada de los servidores públicos, el entusiasmo, la alegría y el espíritu de superación permanente de nuestra juventud y de nuestros trabajadores manuales e intelectuales, alcanzar una clara conciencia colectiva de que sólo el trabajo y el esfuerzo común harán crecer nuestra riqueza social, no son circunstancias que aparecerán espontáneamente.
    Ninguna conquista social aparece espontáneamente, sino que deben ser literalmente construidas y realizadas gracias al empeño diario de cada pueblo, de su voluntad, de su determinación y muchas veces, del propio sacrificio de la vida. Un pueblo puede ocupar un espacio pequeño o grande en la geografía y no será mejor, ni será más digno, ni alcanzará grandes victorias cívicas y humanas, si no se nutre de un pensamiento renovador, si no hay hombres y mujeres dispuestas a proclamar esas ideas y a hacerlas posibles con el esfuerzo de todos.
    Decimos esto, porque ha comenzado pulular por allí, en el momento en que son más importantes las ideas rectoras y la aparición de direcciones cívicas y políticas imbuidas de su deber de derrotar a los encarnizados enemigos de la Patria, el criterio estrecho que niega el papel de las ideas, el criterio que reniega de la importancia decisiva de una dirección política y de los liderazgos positivos.
    ¿Qué sería de América Latina sin el pensamiento preclaro de nuestros próceres, de aquellos que hicieron suyas las ideas de la Ilustración, las propusieron a los pueblos y las adaptaron a las condiciones de Nuestra América? ¿Qué sería de nuestros pueblos sin las Guerras de Independencia, sin Héroes que las encabezaran o Patricios que las hicieron suyas? ¿No vencieron a los imperios coloniales y nos heredaron principios e ideas rectoras?
    La pregunta es sencilla ¿Aprenden los pueblos a descubrir sus grandes tareas históricas si nadie las expone, si nadie las explica, si nadie las difunde, si nadie es capaz de derrotar el espíritu conformista o el engaño permanente de los que se valen de todos los medios para que los pueblos no conozcan su realidad y no se rebelen? ¿Pueden ocuparse de encontrar las respuestas claras a sus angustias y preocupaciones, los grupos sociales o los pueblos que son víctimas de las corrientes económicas y políticas que los engañan u oprimen o les arrebatan las riquezas materiales y espirituales que les pertenecen, sin recurrir a ideas rectoras o a las ideas liberadoras? ¿Pueden triunfar los pueblos si algunos luchadores o luchadoras no elevan su voz, si no hacen oír sus proclamas o manifiestos y les muestran un camino de lucha y de victoria?

    ResponderEliminar
  3. La respuesta también es sencilla. Sin una dirección política esclarecida, los pueblos no aprenden solos, espontáneamente, a encontrar el camino de su liberación o sus victorias cívicas. Sin una clara explicación sobre las causas que provocan los males sociales, sin el señalamiento de las fuerzas económicas y políticas que provocan las crisis, la pobreza o el desamparo social y la manera de enfrentarlas, los pueblos no se preparan ellos solos, por pura casualidad, para derrotar a esos enemigos. Por sí solos, sin dirección estratégica, los pueblos ascienden únicamente hasta el nivel de la lucha espontánea. Para dar un paso más, hasta alcanzar el nivel de la lucha política y proponerse la conquista del poder del Estado, necesitan construir la organización adecuada y las herramientas adecuadas.
    Esas anti ideas, si así se les puede llamar, esos conceptos que reniegan de las ideas rectoras, de la organización política y la necesidad de que existan hombres y mujeres capaces de proclamarlas y difundirlas, dejan las luchas sociales en su fase espontánea, en la pura protesta que no produce por sí misma ni un programa político aglutinador, ni el sentido de organización y dirección que facilite la derrota de los enemigos.
    Esto mismo ocurrió en la lucha contra el TLC. A pesar de su fuerza demostrada, de su potencia social, careció de los liderazgos y las propuestas que la convirtieran en una lucha política contra los mentirosos y vendepatrias que todos conocemos. Mientras en nuestras propias filas algunos renegaban de la política, otros, los politiqueros, se adueñaban de todo el espacio político y se preparaban para mantener en sus manos el control del Estado, recurriendo a las mismas herramientas electorales de las que algunos renegaban y condenaban como métodos espurios.
    Otra cosa completamente distinta, es suponer que las ideas adecuadas y las direcciones políticas, por lúcidas o valerosas que sean pueden, por sí solas, acometer la tarea de los cambios y transformaciones sociales. En las sociedades humanas sólo la activa participación de los pueblos hace posible sus grandes triunfos históricos. Desde la Independencia hasta las victorias sociales de nuestros días, alcanzadas por pueblos hermanos o como en nuestro caso, las Garantías Sociales, el Código de Trabajo, la Caja del Seguro Social, el Sistema de Banca Nacionalizada, el ICE, el CNP o las Universidades Públicas, sólo fueron posibles porque el pueblo cobró conciencia y se puso en movimiento.

    ResponderEliminar
  4. De modo que, por expresarlo en términos sencillos, debemos decidir que las transformaciones sociales se realizan de arriba para abajo y de abajo para arriba. De arriba para abajo representa la acción de las direcciones políticas y de las ideas avanzadas. De abajo para arriba representa la conciencia y la movilización de los pueblos, su participación activa en los movimientos políticos de carácter transformador, liberador y progresista.
    Las direcciones políticas, cuando mantienen una activa vinculación con las bases sociales, cuando construyen partidos u organizaciones formados por auténticos luchadores y luchadora sociales, cuando examinan con detenimiento y espíritu científico las fuerzas que actúan en la sociedad, no son “una cúpula”, como despectivamente se les llama.
    ¿Alguien puede pensar que en el Partido Patria Nueva hemos propuesto como nuestro precandidato presidencial, al Lic. José Miguel Corrales Bolaños, sólo porque las campañas requieren de figuras relevantes o porque él se basta a sí mismo, para recuperar las conquistas sociales en peligro de perderse? Pues no. Lo hemos propuesto porque su trayectoria de vida lo califica de sobra y porque nos ayuda a demostrar, con su figura emblemática, que nuestro pueblo es capaz de unirse en torno suyo y recuperar lo perdido.
    Un verdadero dirigente, no cae en la tentación del envanecimiento o la creencia de estar por encima de su pueblo. Además, para evitar los mandos incontrolados o arbitrarios, las organizaciones políticas tienen a su haber innumerables procedimientos de trabajo, desde la crítica y la autocrítica permanentes, hasta la realización de Congresos partidarios o reuniones de trabajo colectivo. El equipo de dirección mismo, sólo puede ser concebido como un colectivo entre iguales, cuyo trabajo está garantizado por la calidad moral e intelectual de sus miembros.
    Pero una organización así, tampoco se construye espontáneamente o de un día para otro.

    ResponderEliminar
  5. Y AHORA CULMINO:

    La tesis de que el capitalismo es un mal sistema para el hombre común se basa principalmente en dos argumentos: -Hace a los ricos más ricos y a los pobres más pobres. -Es indiferente al dolor que causa porque para que funcione correctamente debe hacerlo bajo las leyes inflexibles del mercado, distribuyendo la riqueza según patrones que no dependen de ninguna voluntad humana específica.
    Para remediar esos "males", son muchos los políticos, economistas e intelectuales que en todas partes del mundo proclaman la necesidad de "humanizar" al mercado. Por supuesto que esa "humanización" no tiene otra forma efectiva de instrumentarse sino a través de la voluntad "soberana" del sistema político. Es decir, esa teoría sostiene que cuanto mayor es la "intervención política", mayor es la sensibilidad social hacia los problemas de los ciudadanos. Esos son los pilares en que se apoyan, ayer y hoy, los fundamentos del socialismo, del estatismo y del intervencionismo estatal.
    La dura realidad se encarga de demostrar constantemente la falsedad de tal razonamiento. Sin embargo, parecería que a los latinoamericanos les gusta más el "encantamiento" de las palabras amables que las pruebas irrebatibles de los hechos reales. América Latina gana el campeonato mundial en esas lides. Seguimos votando por el socialismo "humanista", mientras la terrible sangría poblacional que padecemos emigra hacia aquellos países donde rige el capitalismo "salvaje". ¡Toda una paradoja!

    ResponderEliminar
  6. Para no saturar,: ¿ no creen Uds. que deberíamos movernos hoy en día un poco más entre J. Rawls, sin dejar a un lado las teorías sobre la " actual", Vida Líquida que nos describe Bauman.
    .Conjugar estas filosofías, aderezadas con algo de Habermas tal vez ayude.
    Saludos.

    ResponderEliminar