Por: Ernesto Ekaizer |
Los SMS intercambiados, los conocidos, vaya, entre Mariano Rajoy y Luis Bárcenas, primero como líder del PP en la oposición y más tarde, ya como presidente del Gobierno, nos introducen en el tema del encubrimiento. Es lo que ha estado presente en la defensa política y personal incondicional llevada adelante por Mariano Rajoy desde que aflora la presencia del entonces tesorero nacional en la trama Gürtel, en febrero de 2009, y lo que es todavía más evidente en la defensa jurídica desarrollada por Federico Trillo dentro del procedimiento, con la aquiescencia del líder máximo del PP.
Este era el encubrimiento visto desde fuera.
Pero, ahora, estamos asomándonos a ver el encubrimiento desde dentro. Esta es la fase actualmente en curso. Aquella que empieza con la publicación de la contabilidad secreta manuscrita de Bárcenas con el visado de Álvaro Lapuerta el 31 de enero de 2013 en EL PAÍS y la confesión del ex tesorero nacional al diarioEl Mundo el 7 de julio, seguida ahora por los SMS entre Bárcenas y Rajoy difundidos por el citado periódico.
El líder de la oposición primero y presidente del Gobierno en la actualidad no habla en público de su ex tesorero. Pero se reserva una profusa relación telefónica y epistolar a través de mensajes con Bárcenas. Es elocuente su preocupación. Difícilmente pueda pegar ojo.
Y esta fase actual, que llamaremos del encubrimiento visto desde dentro, es la diferencia. Es la respuesta a la pregunta "¿qué ha cambiado?", que formuló el portavoz del PP, Alfonso Alonso, el jueves pasado, día 11 de julio, en la Diputación Permanente del Congreso de los Diputados, al sentenciar sumarísimamente culpable (delincuente a secas) a Luis Bárcenas.
Si nos atenemos a la entrada Cover-up ( Encubrimiento) que ofrece Wikipedia "la fechoría original que se encubre puede ser relativamente menor, como pudo ser 'el robo de tercera clase' que desencadenó el escándalo Watergate [el espionaje de la Casa Blanca y del partido Republicano en la sede del partido Demócrata del hotel Watergate de Washington D.C, en 1972], pero el encubrimiento añade tantos delitos adicionales (obstrucción a la justicia, perjurio, pagos y comisiones) que terminan por convertirse en mucho más graves que el delito original".
Y prosigue: "Los encubrimientos no necesariamente requieren la manipulación activa de hechos o circunstancias. La forma más común de encubrimiento es la que emana de la inacción, la pasividad... Es el encubrimiento pasivo".
Desde luego, la contabilidad secreta manuscrita describe una situación peor a la que fue el origen del Watergate, o la operacion de espiar la sede del partido Demócrata durante la campaña electoral.
Aquí, estamos hablando de donativos presuntamente ilegales (financiación ilegal y cohecho por la presencia de empresas que contratan con la Administración Pública) y reparto de complementos salariales procedentes de ese mismo dinero sucio.
Y en lo que se refiere al encubrimiento, parecería que estamos lejos, a la luz de los SMS y de la defensa de Bárcenas que ha desarrollado el PP, y Mariano Rajoy en primer lugar, dentro y fuera del procedimiento judicial, de un encubrimiento pasivo, producto de la inacción.
Los mensajes revelan la colaboración Bárcenas-Rajoy antes y después de la llegada de la comisión rogatoria de Suiza, la primera que acredita un patrimonio oculto de hasta 22 millones de euros en el Dredner Bank (LGT) de Ginebra. Mientras el 1 de septiembre de 2011, Rajoy felicita a Rosalía Iglesias por el sobreseimiento provisional que ha firmado el juez Antonio Pedreira el 29 de julio de 2011 y comunicada a las partes ése 1 de septiembre, Federico Trillo hace declaraciones en esa misma fecha a través de las que denuncia que todo el procedimiento es un montaje político del ministerio del Interior de Rubalcaba y ataca a las dos fiscales del caso, Concha Sabadell y Miriam Segura.
No conocemos mensajes anteriores, pero ya existía información de la afectuosa acogida de Rajoy al sobreseimiento provisional de "Rosa", como llama a Rosalía Iglesias, esposa de Bárcenas, en mayo de 2010. También por obra del juez Pedreira.
En el cruce de mensajes aparece una tercera persona. Y esta personalidad es relevante. Se trata de Alfredo Prada. ¿Recuerdan su campaña electoral del 20-N para obtener su escaño por León ? "Prada a tope". Pues aquí, en esta historia, tenemos Prada a tope.
En mi libro El caso Bárcenas, el relato se detiene en las páginas 168 y 169 en Alfredo Prada, un hombre que acoge entre sus próximos Mariano Rajoy después de la tensión y crisis que le obliga a abandonar el cargo ex vicepresidente segundo y consejero de Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid con Esperanza Aguirre.
Rajoy le nombra representante del PP ante el exterior. Pues Bárcenas, en mayo de 2011, al intentar persuadir al juez Pedreira de que debe darle el sobreseimiento, sugiere a Prada y a Jorge Trías Sagnier organizar un encuentro en el despacho de éste último con el juez Pedreira, para garantizarle que Bárcenas nada tiene que ver con la trama Gürtel.
"Trías se lo vende a Pedreira como lo que es: un hombre de confianza de Mariano Rajoy. Es actualmente responsable de la Oficina del PP en el exterior. Pero, bueno, eso no importa. Lo mismo que puede representar al PP en el exterior, este licenciado en Derecho por la Universidad de León y doctor en Derecho por la Universidad Rey Juan Carlos puede ofrecerle la visión del PP al juez Pedreira con mayor autoridad que Trías. Al juez Pedreira le parece bien la idea".
El relato prosigue: "Pedreira, acostumbrado a moverse en taxi por la ciudad, se acerca desde el Tribunal Superior de Justicia de Madrid al despacho de Jorge Trías, en la calle de Almagro. Sube las escaleras a la primera planta del edificio. Y allí, en el despacho de Trías, el mismo que ha frecuentado Bárcenas, en la misma mesa cuadrada, el juez Pedreira escucha a Prada. El representante del PP ante el exterior hace una presentación del caso. Explica al juez que no hay un problema de financiación ilegal y que, en todo caso, se trataría de un grupo que se habría enriquecido a costa del partido. Le explica al juez que Bárcenas es inocente y que la batería de pruebas contra él es muy endeble".
Esta narración sobre la intervención de Prada, en mayo de 2011, representa uno de los elementos del sprint final ante un Pedreira que pierde la competencia de la causa pero al tiempo se muestra dispuesto a decretar el sobreseimiento provisional de Bárcenas. Lo hará con fecha 29 de julio de 2011, y ello después que Bárcenas convertirá al padre Francisco Santos, parroco de la iglesia del Pinar de Chamartín, en la calle Jazmín de Madrid, en su confesor sabiendo antes que lo es desde hace años del juez Pedreira.
Lo importante: Rajoy en persona, en sus entrevistas con Trías Sagnier en la calle Génova, supervisa la marcha de las gestiones sobre el juez Pedreira que desarrolla el citado abogado. No es Rajoy el único en seguir el contacto de Trías con Pedreira. Javier Arenas le pide a Trías que le acompañe a ver a Pedreira durante muchas de las reuniones y algunas comidas a un hombre de su confianza, un "propio". Se trata del abogado Pedro Gómez de la Serna, diputado por Segovia y portavoz de la comisión constitucional del Congreso de los Diputados tras las elecciones del 20-N de 2011.
Todos estos movimientos los conoce Mariano Rajoy, algunos muy directamente. ¡Ilustres juristas tratando de interferir en el procedimiento judicial! Lo consiguen con Pedreira, pero fracasarán. En marzo de 2012, la juez Teresa Palacios, ponente en la sección cuarta de lo Penal de la Audiencia Nacional, propondrá la anulación del sobreseimiento de Bárcenas. Porque el juez Pedreira, al perder la competencia, simplemente dictó una resolución...que no podía dictar. Y la sección cuarta así lo asume.
En un SMS de Rajoy a Bárcenas, del 10 de abril de 2012, se dice: "Luis, nada es fácil, pero hacemos lo que podemos. Ánimo".
"Nada es fácil". A qué se refiere. ¿Al procedimiento judicial? "Hacemos lo que podemos". ¿Está hablando de la causa? Si se puede saber ¿qué han podido hacer?
Estábamos, pues, con la reaparición en escena de Alfredo Prada. Y ahora ya estamos hablando del hombre que es portavoz de la Comisión de Justicia del Congreso.
Según la infomación aportada por Eduardo Inda y Esteban Urreiztieta en El Mundo, Prada es uno de los intermediarios entre Rajoy y Bárcenas para valorar, por ejemplo, quién debe sustituir a Antonio Salinas, cuyo mandato vence en octubre próximo, al frente de la Fiscalía Anticorrupción. "Hablé con nuestro amigo, gracias. Es fundamental que tengas en cuenta el nombre que él te propuso para este puesto", le escribe Bárcenas a su amigo Mariano.
Estaríamos al menos en grado de tentativa en la inteferencia de una autoridad en la independencia de la justicia.
En esta nueva fase de encubrimiento desde dentro, recordemos que Bárcenas no desmiente que se trata de su letra el mismo día, el 31 de enero de 2013, que EL PAÍS publica las catorce fotocopias manuscritas por el ex tesorero nacional y visadas por Lapuerta. Es Mariano Rajoy quien a través de intermediarios logra que cambie su declaración pública inicial para afirmar el 4 de febrero por primera vez que no es su letra y que está dispuesto a someterse a una prueba pericial caligráfica. Por "lealtad a Rajoy" no solo niega que sea su letra sino va más lejos al engañar a la policía judicial dos días más tarde, el 6 de febrero de 2013, forzando los trazos en la Fiscalía General del Estado.
Ahora bien, el nuevo letrado de Bárcenas, Javier Gómez de Liaño-el que manda soy yo, ha decidido que podía preparar la declaración del ex tesorero nacional del PP sin pedir aplazamiento, dado su nombramiento el pasado jueves, día 11 de julio.
Al tiempo, ha señalado que su cliente debe ser disciplinado y que no le recomienda "tirar de la manta". Los SMS difundidos, ¿cuentan con su conocimiento y aprobación? Si no es así, aquí "el que manda es Bárcenas". Y, por tanto, el ex tesorero nacional del PP le acaba de hacer lo mismo que solía a Miguel Bajo y Alfonso Trallero, quienes le abandonaron el pasado lunes, día 8, tras publicarse sin su conocimiento la conversación en el diario El Mundo.
Hay un punto en la próxima declaración de Bárcenas que también plantearía un potencial encubrimiento de Mariano Rajoy. Es el referido a la comisión-mordidapagada a raíz de la adjudicación de la contrata de limpieza en Toledo, en 2007.
La cifra que se le atribuye a Bárcenas en la conversación publicada por El Mundo es de 200.000 euros. Sin embargo, fuentes fidedignas que recuerdan los términos del contrato y de la comisión pagada señalan que se trata de una cifra superior a esa cantidad.
Y, en segundo lugar, hay un nombre clave que Luis Bárcenas, en su peregrinaje que se puede identificar como tentación de tirar de la manta en el otoño de 2010, cuando también entregó las catorce fotocopias de su contabilidad manuscrita a Jorge Trías Sagnier, siempre mencionaba y escribía en un papel para que quedara muy claro a los periodistas con los que solía reunirse en el hotel Santo Mauro, de la calle Zurbano de Madrid, y otros hoteles de cuatro y cinco estrellas de la capital.
Ese nombre, el que según el ex tesorero nacional, se ocupó de todo el tema de esa presunta comisión, entre el origen y la entrega en la calle de Génova, es un colaborador muy directo de María Dolores de Cospedal. Se trata de... Vicente Tirado. Es secretario general del PP de Castilla-La Mancha y presidente de las Cortes de esa región.
Si la versión de Bárcenas sobre la reunión en la que informa de esta ilegalidad a Mariano Rajoy y a Javier Arenas, "la única", según dice, que se ha visto obligado a cometer, es fiel a la realidad, el problema es saber si además de sorprenderse por los papeles que le exhibe Bárcenas, siempre según su versión, ha ordenado alguna investigación interna sobre el acto presuntamente ilícito.
Si no es así... y si tampoco, como sí sabemos, ha dado cuenta de ello a la justicia, estaríamos, de ser veraces los hechos, ante una clara operación de encubrimiento.
Ekaizer, como siempre, poniendo el acento justo en todas las cuestiones. Muy buen artículo
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