LOS AGUIJONAZOS

De nuevo aflora la complicidad del gobierno de Hugo Chávez con la banda terrorista

El gobierno de Rajoy mantiene contacto directo con ETA a través de la embajada española en Venezuela

Por Javier Fonseca

La banda terrorista ETA mantiene una comunicación directa con el gobierno español a través de la embajada que España tiene instalada en Venezuela. Los emisarios de la banda dejan allí sus mensajes y comunicados directos al gobierno, que un miembro de la embajada traslada a Madrid. El vínculo de comunicación se abrió durante la etapa de Zapatero, pero se ha mantenido durante todo el gobierno de Rajoy.

Javier Fonseca. 07.11.12. En los ambientes de víctimas del terrorismo siempre se ha mantenido que contactos entre el Gobierno y ETA había, pero no se sabía ni cómo ni donde. La mayoría de las fuentes consultadas señalaban que estos contactos estaban establecidos a través de miembros del Partido Socialista de Euzkadi y el PNV y siempre se señalaba a dos personas concretas: Joseba Eguíbar y Jesús Eguiguren.

Sin embargo, y como ha podido saber El Aguijón de miembros de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado destinados en el área antiterrorista y con conocimiento directo de lo que está pasando, eso ocurrió en el pasado, y el contacto directo con la banda no se produce a través de estas dos personas, ya que no hace falta. Y es que, el Gobierno de Zapatero abrió a través de la embajada de España situada en la Avenida de Mohedano en Caracas, lo que en el argot del mundo de la inteligencia se conoce como “un buzón”, o lo que es lo mismo un punto de comunicación mutuo. En este caso, ese “buzón” no funciona de forma precisamente escondida. La operativa es de lo más sencilla, y por sencilla y a la luz del día, pasa desapercibida para quienes ven lo que ocurre de forma cotidiana. Un coche, normalmente con dos ocupantes, miembros conocidos de la banda, y a quienes se les vincula con el gobierno de Hugo Chávez y concretamente con su ministerio del interior, se acerca periódicamente a la puerta de la embajada, y entrega un sobre a la persona que está en la puerta. Este sobre va dirigido, bien al embajador, Antonio Pérez-Hernández bien al Consejero de Interior de la embajada, Félix Agustín Díaz Fuentes y lleva siempre la coletilla, de “es del gobierno de venezuela para….”

Estos sobres se entregan en mano a los miembros de seguridad que custodian el edificio quiénes, de forma diligente y disciplinada, nada preguntan al respecto a tenor de la coletilla que utilizan los emisarios de la banda, y que en ocasiones ni siquiera se bajan del vehículo, alargando el brazo desde el coche a una verja oscura que hay casi en la esquina de la embajada. Lo que sí extrañaba a los miembros de seguridad, en su mayoría guardias civiles, es el acento de los emisarios, que en nada parecen venezolanos, algo que sí se comentaba entre ellos.

Ese contacto directo, abierto durante el mandato de Zapatero se ha mantenido con la llegada de Rajoy al gobierno. El oasis que supone para los terroristas de ETA el país caribeño, con destacados miembros de la banda en organismos del gobierno venezolano, supone ahora mismo el nuevo Argel de la etapa ZP-Rajoy.