Ya se han encendido los focos. El público está sentado en sus butacas. Y se ha levantado el telón. El cadáver de una niña de 12 años ya está sobre el escenario. Acaba de comenzar el inevitable circo mediático alrededor deAsunta Basterra Porto, que apareció muerta el domingo 22 en un camino forestal de los alrededores de Santiago de Compostela. Sólo falta un personaje. O quizá dos: el abogado o los abogados.
Emilia Zaballos es una de las penalistas más prestigiosas del país, y su bufete ha estado estudiando el caso de Asunta Basterra. De la misma manera que lo han analizado ya innumerables bufetes de toda España. Hay que estarpreparado en caso de que suene el teléfono desde la cárcel de Teixeira, que es donde duermen los padres de Asuntaimputados por un presunto delito de homicidio que puede derivar en asesinato.
Zaballos no puede descartar que su teléfono suene: a su pesar, se convirtió en mediática hace 20 años cuando le asignaron de oficio la defensa de uno de los imputados en el asesinato de Anabel Segura. Y diez años después, aceptó la defensa de uno de los, entonces, presuntos violadores y asesinos de la joven discapacitada Sandra Palo en Getafe. “Todo el mundo de la profesión está pendiente del caso [Basterra]”, señala en conversación telefónica.“Nosotros también nos lo hemos planteado”.
- Pero, ¿cómo es el procedimiento? ¿Estudiáis el caso y os ofrecéis como defensa?
- Yo nunca lo he hecho. En el caso de Anabel Segura me llamaron de oficio y en el de Sandra Palo me llamó el cliente. Pero sí hay abogados que se ofrecen. En muchos de estos casos, los defensores sacrifican la compensación económica por la mediática. Aunque no es fácil tomar la decisión de encargarse de un caso así. El desgaste psicológico del abogado es enorme. Tus clientes están juzgados de antemano por la opinión pública, así que tienes que luchar contra dos frentes.
El pasado viernes, el juez José Antonio Vázquez Taín -también mediático por su intensa actividad contra el narcotráfico en Galicia y por haber investigado el robo del Códice Calixtino- envió a prisión comunicada y sin fianza a los padres de la niña: Alfonso Basterra y Charo Porto. Momentos después, sus respectivos abogados, Roberto Goris y Juan Guillán, renunciaban a defenderlos.
“No son penalistas”, señala Emilia Zaballos. “No hay que buscarle más vueltas.Que sus abogados renuncien no significa que sean culpables o inocentes. Es muy honesto por parte del letrado reconocer que no está suficientemente preparado para un caso así”.
Los padres de asunta a la salida del registro de la casa de rosario. (efe)
Alfonso Basterra y Charo Porto llegaron en la tarde del pasado viernes al departamento de ingresos de la prisión coruñesa de Teixeira. Inmediatamente se les asignó a cada uno un preso de apoyo. Basterra y Porto son reclusos vigilados bajo el protocolo carcelario de prevención de suicidios. “Se les ha asignado a cada uno un preso que se pasa todo el día con ellos, vigilándolos. Estos presos duermen en la misma celda con ellos, por supuesto. Suelen ser presos de tercer grado, gente con mucha experiencia en la cárcel pero muy equilibrados. A cambio de esta vigilancia reciben beneficios penitenciarios… No reducciones de condena, pero sí permisos… ese tipo de privilegios”, señalan fuentes de instituciones penitenciarias.

Durante el máximo de 72 horas -hábiles, hasta el miércoles- que Basterra y Porto pasarán en el departamento de ingresos de Teixeira, tres personas más se encargan de su bienestar. Un médico les practica una revisión y un educador estudia todos los documentos referentes a su pasado, currículum laboral, datos vitales y antecedentes… Todo lo que pueda ser documentado. “Y después, con toda esa información, el educador [un funcionario de prisiones especializado en este trabajo] realiza una entrevista personal y presenta un informe a la dirección de la prisión”.
Basterra y Porto tienen tres días para elegir abogado. De no hacerlo, se les asignará de oficio. Entre los grandes penalistas españoles, según las fuentes consultadas, existe la certeza de que el caso acabará en manos de uno de los grandes penalistas mediáticos de España. Y numerosos bufetes ya lo están estudiando por si acaban haciéndose cargo del mismo.
“Charo Porto es abogado. No va a elegir uno inmediatamente. Va a escoger a un abogado de oficio primero. Puede rechazar a los designados hasta tres veces. Sólo después buscará una defensa particular. Es como se suele hacer habitualmente. Cuando alguien ingresa en la cárcel, no tiene la misma capacidad de comunicación. Es difícil buscar un abogado. Esperan y se estudia mucho a quién escoger. Incluso, a veces, el contacto con otros presos ayuda a enterarse de algún nombre de abogado que pueda llevar un caso de este tipo”, señala Zaballos.
Marcos García Montes, en cuyo currículum también muy mediático se incluyen casos como el de Rumasa, GAL o Rocío Wanninkof, también reconoce que su bufete está siguiendo el caso. “Es normal. Como tú, como periodista, sigues ciertas noticias, aunque no vayas a trabajar en ellas, nosotros seguimos estos casos. ¿Si me llaman? Tendré que ver lo que me cuentan, pensar y poner mis condiciones”.
Coincide con Zaballos en que el caso acabará en manos de uno de los grandes bufetes: “Muchos abogados, aunque se lo ofrezcan, no van a coger el asunto. Hay abogados que se ofrecen gratis para hacerse famosos. Yo siempre pongo dos condiciones: libertad e independencia. Porque muchas veces el abogado tiene que optar por hacer lo que el cliente no quiere que hagas”.
El sábado por la noche, en el programa Abre los ojos de Tele5, el circo mediático soltaba a los leones: el padre de Alfonso Basterra aceptaba ser entrevistado para lastrar culpabilidad sobre su nuera: “Ha podido ser ella y mi hijo tal vez la haya encubierto en algún momento”, dijo. García Montes, como Zaballos, asegura que todo este espectáculo será perjudicial para el abogado que acepte la defensa: “La prensa hasta adelantó informes de ADN que ni siquiera habían podido haber sido hechos en tan poco tiempo. El abogado de los padres de Asunta Basterra será considerado un villano por la opinión pública, que ya ha dictado su sentencia”.