"Han pasado 42 días desde el 28 de marzo de 2015, fecha del entierro del último enfermo confirmado en laboratorio. El brote en Liberia de la enfermedad del virus del Ébola ha acabado".
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"Hoy, 9 de mayo de 2015, la OMS declara a Liberia libre transmisión del virus del Ébola. Han pasado 42 días desde el 28 de marzo de 2015, fecha del entierro del último enfermo confirmado en laboratorio. El brote en Liberia de la enfermedad del virus del Ébola ha acabado", explica la organización sanitaria mundial en un comunicado.
Ninguna de las 332 personas que pudieron mantener contacto con la última infectada, pero en este periodo ninguna de ellas ha dado síntomas de padecer la enfermedad. Sin embargo, las autoridades se mantienen alerta y en los laboratorios del país realizaban en abril unos 300 análisis por semana, todos ellos negativos.
"En esos dos meses, la capital, Monrovia, fue escenario de algunas de las escenas más trágicas del brote que ha afectado al África occidental: puertas de centros de atención cerradas por la excesiva afluencia, pacientes muriendo en el suelo de los hospitales y cadáveres que tardaban días en ser recogidos", destaca la OMS. Entonces se cancelaron vuelos, había escasez de combustible y alimentos y se cerraron colegios, negocios, fronteras, mercados y la mayoría de las instalaciones sanitarias.
"Hay que homenajear al Gobierno al pueblo liberiano por su inquebrantable valor y su determinación para derrotar al ébola. Médicos y enfermeros siguieron tratando a los pacientes, incluso cuando no había protecciones profilácticas (...). En total, fueron infectados 375 trabajadores sanitarios, de los cuales 189 murieron", subraya la OMS. La organización también destaca el trabajo de los voluntarios y las aportaciones de la comunidad internacional.
Según datos de la OMS, más de 11.000 personas han muerto de ébola en Liberia, Guinea y Sierra Leona desde el comienzo del brote en diciembre de 2013. Casi la mitad de estas muertes se han producido en Liberia, donde el brote alcanzó su peor momento entre agosto y octubre. Además, continúa habiendo casos en Guinea y Sierra Leona, lo que genera un alto riesgo de que los infectados puedan cruzar la frontera hacia Liberia utilizando las "porosas" fronteras de la región.
"El Gobierno es plenamente consciente de la necesidad de seguir en alerta y tiene la experiencia, capacidad y apoyo de la comunidad internacional", señala la OMS, que mantendrá además a personal hasta finales de año en este país para seguir con la vigilancia.