País incierto: Ciudadanos vigilantes

Escrito por magda el 29 abril 2013 en violencia


El pasado fin de semana fue capturado uno de los diez más buscados del FBI: Eric Justin Toth, un exprofesor de primaria acusado de posesión y producción de pornografía infantil.
En la lista del FBI se encuentran aquellos que son “una amenaza para la sociedad” y en este caso, además, por su apariencia distintiva (muy alto, flaco y con un lunar debajo del ojo) difundieron su nombre y los diferentes cambios de imagen con los que se había integrado a las comunidades escolares o a trabajos en los que tuviera contacto con niños en distintas ciudades de los Estados Unidos, pensando en que los ciudadanos lo podían reconocer y denunciar.
De los 495 hombres y mujeres que han formado parte de la lista de los más buscados del FBI, 465 han sido capturados o localizados y en 153 de los casos ha sido gracias a una pista que han aportado los ciudadanos.
En México, en los últimos meses, la política del gobierno ha sido no dar información de la violencia para no sembrar el pánico. Lo cierto es que los ciudadanos no sabemos a ciencia cierta, cuáles amenazas enfrentamos, y en el caso de saber algo también es un peligro denunciarlo.
El miércoles pasado el comisario general de la Policía Federal, Enrique Galindo Ceballos, informó que  que en lo que va del gobierno de Enrique Peña Nieto, se han capturado a 14 mil personas, de las cuales 250 son “líderes” en las organizaciones criminales.  Aseguró que ha impactado en la estructura del narco, aunque los números de muertos siguen sin disminuir significativamente.
No solo no se ha sentido, sino tampoco los hemos visto: de acuerdo a la nueva política de comunicación, no se presentan imágenes de los detenidos porque esto les daba fama y reconocimiento, y porque se volvían ejemplo de muchos jóvenes que querían ser como ellos.
Por supuesto estoy de acuerdo en el que no se glorifiquen las hazañas de los criminales y mucho menos que se muestren las ganancias que deja el pertenecer al narco o a la delincuencia organizada. También es indispensable que se protejan los derechos humanos y que no se viole el debido proceso, pero con los niveles de impunidad que tenemos en nuestro país, aun está por verse cuántos de esos 14 mil detenidos de los últimos cinco meses, efectivamente cumplirán una sentencia y cuántos en semanas estarán libres, haciendo una vida normal como el vecino de al lado.
En nuestro país, cuando se habla de la estrategia de seguridad, se sigue insistiendo en el número de policías y la presencia de las fuerzas del orden, cuando lo cierto es que nunca habrá recursos que alcancen para cuidarnos si dejamos todo en manos de ellos. Las redes sociales han demostrado que muchos ojos, en todas partes y la información inmediata de lo que ocurre puede ser más efectivo y disuasorio de incumplir la ley, que el policía tradicional que hace rondines. Pero el problema, es que si a los ciudadanos nos dicen que no está pasando nada, no sabemos de qué o quiénes hay que cuidarnos.
Por lo pronto, parece que no es de los asesinos seriales, aunque los muertos aparezcan en serie, pues según Michael Stone, creador del Índice de Maldad, que la semana pasada asistió al Primer Congreso Internacional de Investigación Forense, organizado por la Academia Mexicana de Investigadores Forenses (AMIF) en Ciudad Juárez, no estamos rodeados de multihomicidas seriales sino de jóvenes que se convierten en sicarios y se suman al crimen organizado como quien ingresa a un trabajo.
Sinceramente, no sé qué debe de dar más miedo. A fin de cuentas los psicópatas, con problemas para manejar sus emociones y carentes de empatía son sólo entre el 1 y el 3 por ciento de la población; los que necesitan un empleo bien retribuido y sin capacitación, lamentablemente, son muchos más mexicanos.
Asesinos seriales
“A los policías que nunca se dan por vencidos” dedica este libro Vicente Garrido. Y aunque parezca poco posible, aún en nuestro país hay de esos. Perfiles Criminales es un libro del sello Ariel que, lo primero que nos hace pensar es en las famosas series de televisión que han enganchado a media humanidad, donde los espectadores acompañan en el misterio a esos genios súper investigadores que descubren con sólo una palabra o un ademán que refleja un comportamiento extraño, quiénes son los malos.
Perfiles criminales
Como les decía en el programa CharrosVSGangsters en el que colaboro los miércoles, es un libro para los que tenemos alma deCriminal Minds y de investigador forense. Además de explicar las motivaciones que llevan a los criminales a cometer determinado delito, así como la relevancia de hacer un perfil criminal, cómo se construye y las características de un buen perfilador, cuenta los detalles de los casos y las historias de los más terribles asesinos en serie y psicópatas como el Unabomber, el Hijo de Sam y varios más.
Y obviamente, para seguir en el tema, también les recomiendoPsycho Killer  de los Talking Heads, la banda encabezada por David Byrne, que la revista Rolling Stone ubicó entre los grandes artistas de todos los tiempos.